Generosidad. Inclinación o propensión del ánimo a anteponer el decoro a la utilidad y al interés. 3. Valor y esfuerzo en las empresas arduas. 4. Nobleza heredada de los mayores.
decoro1. Nivel mínimo de calidad de vida para que la dignidad de alguien no sufra menoscabo. Su sueldo le permite vivir con decoro.
decoro1. Nivel mínimo de calidad de vida para que la dignidad de alguien no sufra menoscabo. Su sueldo le permite vivir con decoro.
Si das a los pobres, tus necesidades serán satisfechas. Pero al que cierra los ojos ante la pobreza, le cae una maldición.” Proverbios 28:27
Este principio refleja la historia de muchos pueblos que, al cerrar sus ojos a las necesidades de los más vulnerables, actuaron con indiferencia y hoy son sociedades donde el progreso y el bienestar parecen esquivos. Para salir ahora de su egoísmo, deben entender y practicar a fondo lo que la generosidad significa.
Casi siempre relacionamos la generosidad con la posibilidad de dar, bien sea dinero, limosnas, regalar lo que ya no nos sirve o realizar una labor altruista en nuestro tiempo libre o al final de año. Sin embargo, como parte del carácter, la generosidad va mucho más allá, pues es una actitud que implica llevar a los que están en nuestro radio de influencia a un nivel mayor del que se encuentran. Se trata de darse a sí mismo.
Por lo general, debemos darle a aquellos que son “tierra fértil”, es decir, aquellas personas que por no contar con oportunidades, sociales o culturales, ven refrenando su potencial humano. Aquellas personas que quieren crecer y triunfar, personas honestas pujantes, dispuestas, no aquellas personas perezosas que quieren vivir de los demás sin esforzarse. La generosidad es considerar a otros como queremos que los otros nos consideren a nosotros.
Cuando somos generosos, podemos recibir nuestras propias recompensas. Es mejor poseer una porción pequeña de algo grande, que poseer algo grande sacado de una porción pequeña. La generosidad riñe con la prosperidad de los avaros y la miseria de los perezosos. El darse como persona implica la más alta forma de generosidad que se pueda imaginar.
El romano Cicerón ya lo decía: “No hemos nacido solamente para nosotros”.
La generosidad empieza en nuestra manera de ver a los demás y de apreciar sus potenciales.
Veamos lo que la biblia dice al respecto de la avaricia y de los necesitados:
AVARICIA: Codicia, 1Sa 8:3 Pero sus hijos no siguieron su ejemplo, se dejaron seducir por el dinero, y en vez de hacer justicia aceptaban cohechos.
Luc 12:15 Después dijo a la gente: "Eviten con gran cuidado toda clase de codicia, porque aunque uno lo tenga todo, no son sus posesiones las que le dan vida.
Rom 1:29 En ellos no se ve más que injusticia, perversidad, codicia y maldad. Rebosan de envidia, crímenes, peleas, engaños, mala fe, chismes
Col 3:5 Por tanto, hagan morir en ustedes lo que es "terrenal", es decir, libertinaje, impureza, pasión desordenada, malos deseos y el amor al dinero, que es una manera de servir a los ídolos.
Heb 13:5 No corran tras el dinero, sino más bien confórmense con lo que tienen, pues Dios ha dicho: Nunca te dejaré ni te abandonaré.
Eph 5:5 Sépanlo bien: ni el corrompido, ni el impuro, ni el que se apega al dinero, que es servir a un dios falso, tendrán parte en el reino de Cristo y de Dios.
POBRE: Menesteroso, necesitado.
Exo 23:3 Tratándose de justicia, no favorecerás ni siquiera al pobre.
Exo 23:6 No tuerzas el derecho del pobre en su pleito.
Exo 23:10 Seis años sembrarás tus campos y sacarás sus frutos;"
Exo 23:11 al séptimo no los cultivarás y los dejarás descansar. Los pobres de tu pueblo comerán lo que encuentren allí, y si sobra algo, lo comerán los animales del campo. Harás lo mismo con tu viña y tu olivar.
Lev 19:9 Cuando sea tiempo de cosechar, no siegues hasta la misma orilla del campo, ni recojas las espigas caídas.
Lev 19:10 Tampoco rebusques en tus viñas, ni recojas de tus huertos las frutas caídas. Las dejarás al pobre y al forastero: ¡Yo soy Yavé, tu Dios!
Rom 15:26 pues en Macedonia y Acaya les pareció bien hacer una colecta en favor de los pobres de la comunidad de Jerusalén.
Rev 3:17 Tú piensas: "Soy rico, tengo de todo, nada me falta". Y no te das cuenta de que eres un infeliz, digno de compasión, pobre, ciego y desnudo.
La pobreza generalizada en una sociedad es el síntoma de que la generosidad no se ha desarrollado entre sus integrantes. La generosidad beneficia realmente a los pobres y vulnerables cuando los ayuda a lograr su propio desarrollo. El peligro mayor es convertir la pobreza en una condición permanente, y esto lo hacen precisamente para poder someter o controlar a su antojo a los menos favorecidos.
La generosidad no solamente dará a la gente pescado para un día, también les enseñará a pescar. La generosidad se ocupa del futuro, no sólo del presente.
La pobreza no es una condición que deba ser tratada sólo con alimento, es más que eso y requiere programas de enseñanza, de entrenamiento y de responsabilidad por otros. La pobreza también puede ser una cuestión de actitud.
La generosidad no solamente dará a la gente pescado para un día, también les enseñará a pescar. La generosidad se ocupa del futuro, no sólo del presente.
Pasos para reflexionar y actuar:
1. Vea el potencial de los demás. Reconozca en los otros lo que ellos pueden llegar a ser. Enfóquese en lo mejor de los demás.
2. Aprenda a ser sensible a las necesidades de otros. Desarrolle un sentido de entender que los demás también tienen necesidades carencias que usted puede aliviar.
3. Comparta sus conocimientos y su experiencia. Empiece por el círculo de sus familiares, amigos, compañeros y conocidos. Trate de brindarse a los demás.
4. Sea voluntario y trabaje con otros y para otros. Hay infinidad de problemas, pero también de instituciones que están haciendo algo. Conviértase en un voluntario comprometido y constante, cuyo trabajo sostenido dé fruto.
La mezquindad es la que nos impide sembrar para el futuro. Si retenemos la semilla, en lugar de sembrarla, no tendremos cosecha en el tiempo por venir. Al ayudar a alguien más a desarrollarse, estamos desarrollándonos nosotros mismos.
La aplicación honesta de los principios, los convierte en hábitos; a su vez, los hábitos correctos le añaden valor al carácter; todo lo que eleva el sentido moral tiende a ser protegido, preservado y empleado para bien.
¿Ha tenido oportunidades de enseñarle a alguien a pescar?¿Ha sido generoso con su tiempo, talento y riqueza?
